MANEJOS CULTURALES |
- Poda (período otoño-invierno).
- Se recomienda efectuar una poda periódica cada 3 ó 5 años, a una altura de 25 cm.
- Para la obtención de leña y mantención del recurso : cortas de los arbustos como mínimo a 15 - 20 cm del suelo con tijerones (descornadoras).
- Esquema de manejo tradicional para la obtención de forraje:
- Para la obtención de forraje : podas en la parte superior en aquellos ejemplares que sobrepasan la altura alcanzable para el ganado.
- La desfoliación o talajeo, producto del consumo por parte de los animales, debe realizarse normalmente en el período verano-invierno, época del año en que no existe crecimiento de la estrata herbácea o ésta aún no reúne aún una tasa de crecimiento adecuada. En caso de períodos de sequía o años con escasa pluviometría, la utilización debe variar en función del desarrollo de la curva de producción de los pastos.
- El período de recuperación permite sólo el talajeo una sola vez al año y éste debe ser intensivo, con cargas apropiadas y por un lapso tal, que el consumo de los arbustos sea efectuado hasta un nivel de 5 – 10 % de material remanente, favoreciendo de esta manera una adecuada recuperación, evitando con ello que los animales produzcan daño en la plantación.
- Esquema de manejo intensivo para la obtención de forraje:
- Se recomienda una relación de 25 % de la superficie total establecida con arbustos forrajeros. Esta superficie debe ser subdividida en tres unidades de potreros. Un potrero utilizado en la engorda de las borregas de reemplazo entre enero y agosto, que, a su vez, puede subdividirse con el objeto de intensificar el ramoneo de los arbustos y permitir una mejor recuperación, ya que el tiempo comprendido entre agosto y enero no es suficiente para alcanzar la disponibilidad inicial. Las otras dos unidades deben ser utilizadas durante el último tercio de preñez (junio-julio) y primer período de lactancia (julio-agosto).
- En años lluviosos, los arbustos forrajeros se someten a talajeos livianos, y en años secos a talajeos pesados.
- Como la utilización del recurso del ramoneo abarca el comienzo del crecimiento de la estrata herbácea, es importante realizar rotaciones de potreros con el objeto de utilizarlos en los diferentes estados iniciales de desarrollo de las especies herbáceas, para minimizar el daño sobre ellas.
- Es recomendable, además, un pastoreo diferido utilizando dos de los potreros en agosto-octubre y enero-junio, y octubre-diciembre, respectivamente. El tercero de ellos permanece excluido al pastoreo durante todo el año. Esta situación se rota año a año, permitiendo que siempre uno de los potreros quede excluido al pastoreo, favoreciendo la productividad de la pradera y el manejo animal.
- En términos generales los sistemas silvopastorales más frecuentes recomendados para zonas de secano :
- Pastoreo diferido: utiliza el recurso forrajero considerando un período de recuperación del forraje, lo que permite el uso de los potreros en diferentes épocas del año, rotándolos de acuerdo a su estación de uso. Las ventajas que este sistema alcanza con la carga animal adecuada son:
- Buena condición corporal de los animales y estabilidad de la comunidad vegetal.
- Está basado en el estado de desarrollo de las plantas y condiciones climáticas. Así se permite que las plantas no sean pastoreadas en los estados más críticos.
- Parte del área es diferida mientras el resto es utilizada en un determinado momento.
- La carga animal es crítica, por lo que debe ser muy bien regulada, de acuerdo a la capacidad de la pradera.
- El sistema permite la resiembra de las especies anuales como también la recuperación de las especies perennes.
- Pastoreo diferido con exclusión anua : similar al anterior, pero en este caso se deja uno o más potreros sin utilización durante todo un año. De esta manera las plantas cumplen su ciclo vital sin interrupciones. Además es especialmente apto para condiciones extremas de secano, ya que permite una mayor respuesta de la pradera a la acumulación de residuo orgánico.
- Como principio siempre se excluye el potrero que ha sido utilizado en el período más crítico, es decir, en la etapa de crecimiento, y siempre se utiliza el potrero que ha sido excluido en la temporada anterior, en el período de menor daño a la pradera, como es durante la senescencia de las plantas, momento en que la semilla ha madurado.
- En este sistema además la exclusión se puede prolongar a un segundo año antes de ser utilizada.
- Entre las ventajas que presenta este sistema se encuentran :
- El sistema está diseñado para favorecer la condición de la pradera.
- Incrementa la densidad de animales en las áreas de pastoreo, debido a la concentración de animales que se produce al excluir los otros potreros.
- Parte del área es diferida mientras el resto es utilizado en un determinado momento.
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RENDIMIENTOS |
- En plantaciones con una densidad de 1.111 pl/ha se puede producir aproximadamente 1,2 – 1,6 t/ha de leña seca.
- En general, en individuos cuyas edades fluctúan entre los 4 y 7 años, se han determinado variaciones entre 0,42 y 6,8 kg de materia seca por ejemplar.
- Respuestas logradas en el secano de la costa de la IV Región establecen buena adaptación en terrazas marinas con mayores precipitaciones; en dunas antiguas con el suelo adecuadamente intemperizado y donde el perfil es profundo; en los valles de terrazas marinas donde el suelo es profundo y fértil; en condiciones topográficas y posición de ladera adecuada, y en los valles de la Cordillera de la Costa, con suelos aluviales profundos.
- En Los Vilos, el atriplex alcanza, a los 30 meses de establecido, valores de 211 kg de ms/ha.
- En terrazas marinas con mayor profundidad, como Agua Amarilla y Huentelauquén (IV Región) se logra un rendimiento de 570 y 785 kg de ms/ha, respectivamente.
- En sistemas de manejo intensivo con carga animal de 0,86 oveja/ha se lograron 17,06 kg/ha de carne y 3,29 kg/ha de lana
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