4. Demanda en el mercado de maderas nativas
a) Demanda interna
La variación que sufre la demanda de un producto puede deberse a varios factores. Entre ellos destacan variaciones en los precios, variaciones en la oferta del producto, ingreso al mercado de nuevos productos, cambio en las preferencias de los clientes, exigencias legales, etc.
En el caso de la producción de madera aserrada nativa en el país, ésta se ha visto fuertemente disminuida en los últimos años, tanto en volumen, como en el porcentaje que representa del total de producción de madera del país.
Según lo anterior, y tal como se observa en el cuadro 1, en
el año 1991 las maderas nativas representaban el 10% del total de producción,
con un monto de 306,9 M m3. A partir de ese año, las cifras han descendido,
hasta llegar a 224,6 M m3 en el año 1999, donde las maderas nativas representan
sólo el 4% del total de producción de madera. Las maderas involucradas en este
análisis corresponden a coihue, laurel, lenga, raulí, roble y tepa.
Cuadro 1:
Producción de Madera Aserrada 1990-1999 (miles m3)
Año |
Total |
Exóticas |
Nativas |
%Nativas |
1990 |
3326,9 |
3044,4 |
282,5 |
8% |
1991 |
3217,5 |
2910,6 |
306,9 |
10% |
1992 |
3019,1 |
2752,2 |
266,9 |
9% |
1993 |
3112,9 |
2835,1 |
277,8 |
9% |
1994 |
3364,4 |
3083,7 |
280,7 |
8% |
1995 |
3801,8 |
3524,2 |
277,6 |
7% |
1996 |
4140 |
3855,7 |
284,3 |
7% |
1997 |
4661,3 |
4403,4 |
257,9 |
6% |
1998 |
4550,7 |
4320,8 |
229,9 |
5% |
1999 |
5253,7 |
5029,1 |
224,6 |
4% |
En cuanto a la producción de astillas provenientes de maderas nativas, se observa también una notable disminución en la última década. En el cuadro siguiente, destaca el año 1993 con una producción de 2366,5 M m3, lo que representaba un 41% del total, mientras que en el año 1999 la cifra alcanza sólo a los 1119,8 M m3, lo que representa un 19% del total de producción, en circunstancias que el total producido en estos dos años es bastante similar.
Cuadro 2:
Producción de Astillas 1991-1999 (miles m3)
Año |
Total |
Exóticas |
Nativas |
%
Nativas |
1991 |
5529,5 |
3700,6 |
1828,9 |
33% |
1992 |
4832,7 |
3021,2 |
1811,5 |
37% |
1993 |
5715,5 |
3349 |
2366,5 |
41% |
1994 |
5615,2 |
3449,8 |
2165,4 |
39% |
1995 |
7347,6 |
4514,7 |
2832,9 |
39% |
1996 |
6184,2 |
4247,5 |
1936,7 |
31% |
1997 |
6032,7 |
4057,9 |
1974,8 |
33% |
1998 |
5457,7 |
3982,6 |
1475,1 |
27% |
1999 |
5840 |
4720,2 |
1119,8 |
19% |
Fuente: Infor, 2000
Los datos anteriores muestran claramente que la tendencia del mercado de las materias nativas ha perdido terreno. Ello se refleja no sólo en volumen sino que también en ingreso de divisas.
Respecto a la producción y al consumo de madera aserrada por región, sólo existe información respecto de ciertas especies nativas y respecto de ciertas regiones (Infor, 1999).
El siguiente cuadro resume la producción de madera aserrada en la VII región (año 1998), según su procedencia de aserraderos móviles o permanentes.
Cuadro
3: Producción de madera
aserrada VII región (m3)
|
Permanente |
Movil |
Total |
Roble |
1594 |
1342 |
2936 |
Coigue |
71 |
- |
71 |
Total nativas |
1665 |
1342 |
3007 |
Total exóticas |
727476 |
114156 |
841632 |
En el cuadro se observa que la producción de madera aserrada nativa, es inferior al 1% del total de lo que se produce en la región. Sin embargo la producción de madera nativa suele ser generalmente muchísimo superior a las cifras registradas, dado que existen faenas que se realizan sin los permisos adecuados, por lo que no forman parte de las estadísticas oficiales.
Cuadro
4: Consumo madera en
trozas VII región (m3)
|
Permanente |
Móvil |
Total |
Roble |
3331 |
3353 |
6684 |
Coigue |
148 |
- |
148 |
Total nativas |
3479 |
3353 |
6832 |
Total exóticas |
1403614 |
251146 |
1654760 |
Fuente:
Infor, 1999
Respecto al consumo de madera nativa en la región, las cifras superan al real producido, lo que viene a suponer que mucho de la madera demandada en esta región, proviene de regiones más australes, o de producción no registrada oficialmente. Las especies que se comercializan en esta región son el roble y el coigue, las cuales tienen un mercado cautivo.
En la VIII región, en cambio, la cosecha de bosque nativo
vía aserradero móvil es mucho más alta que vía aserraderos permanentes,
mientras que en el caso de las especies exóticas la producción de madera
aserrada es notablemente mayor en aserraderos permanentes. Esta situación puede
deberse a que dada la disgregación de los diferentes tipos forestales nativos
en los bosques, resulta más conveniente realizar la cosecha en las cercanías
del bosque.
Cuadro
5: Producción de
madera aserrada VIII región (m3)
|
Permanente |
Móvil |
Total |
Coigue |
239 |
6135 |
6374 |
Laurel |
15 |
365 |
380 |
Mañio |
239 |
- |
239 |
Raulí |
247 |
2919 |
3166 |
Roble |
314 |
4036 |
4350 |
Tepa |
239 |
44 |
283 |
Olivillo |
- |
14 |
14 |
Lenga |
- |
365 |
365 |
Tineo |
- |
144 |
144 |
Ulmo |
- |
263 |
263 |
Total nativas |
1293 |
14285 |
15578 |
Total exóticas |
2395747 |
119409 |
2515156 |
Respecto al consumo, y al igual que en la VIII región, las cifras superan considerablemente la producción de la región. Además hay que considerar que mucha de la madera aserrada se exporta, lo que refleja un indicio de que existe una demanda mayor a la oferta en la zona.
Cuadro 6: Consumo
madera en trozas VIII región (m3)
|
Permanente |
Móvil |
Total |
Coihue |
500 |
15338 |
15838 |
Laurel |
31 |
913 |
944 |
Mañio |
500 |
36 |
536 |
Raulí |
516 |
7299 |
7815 |
Roble |
657 |
10092 |
10749 |
Tepa |
500 |
111 |
611 |
Tineo |
- |
358 |
358 |
Ulmo |
- |
658 |
658 |
Total nativas |
2704 |
34805 |
37509 |
Total exóticas |
4801137 |
263501 |
5064638 |
Como se observa en el cuadro anterior, nuevas especies del bosque nativo se han agregado al proceso productivo. Es así como además del roble y el coigue, que son las predominantes, se integran el laurel, mañio, raulí, tepa, tineo, ulmo, en su gran mayoría especies que pertenecen al tipo forestal siempreverde.
Además esta región es la concentra la mayor cantidad de producción de madera, debido fundamentalmente a la gran cantidad de plantaciones exóticas que posee.
En cuanto a la producción de madera aserrada en la IX región, la producción de madera en aserraderos permanentes o móviles es similar. Si bien son varias especies las que se producen en la región, destaca nuevamente la comercialización de roble y coigue.
Cuadro
7: Producción de
madera aserrada IX región (m3)
|
Permanente |
Móvil |
Total |
Coigue |
11543 |
11217 |
22760 |
Lenga |
125 |
1767 |
1892 |
Lingue |
69 |
- |
69 |
Raulí |
3880 |
3707 |
7587 |
Roble |
16161 |
12954 |
29115 |
Tepa |
62 |
2734 |
2796 |
Laurel |
- |
287 |
287 |
Mañio |
- |
934 |
934 |
Olivillo |
- |
412 |
412 |
Tineo |
- |
826 |
826 |
Ulmo |
- |
542 |
542 |
Total nativas |
31840 |
35380 |
67220 |
Total exóticas |
377608 |
72294 |
449902 |
En cuanto al consumo de las especies del bosque nativo, raulí, tepa y lenga surgen como especies de interés, además de las ya mencionadas roble y coigue.
Cuadro 8: Consumo
madera en trozas IX región (m3)
|
Permanente |
Móvil |
Total |
Coigue |
24017 |
28043 |
52060 |
Lenga |
261 |
4418 |
4679 |
Lingue |
145 |
- |
145 |
Raulí |
8109 |
9268 |
17377 |
Roble |
33774 |
32383 |
66157 |
Tepa |
129 |
6837 |
6966 |
Laurel |
- |
718 |
718 |
Mañio |
- |
2336 |
2336 |
Olivillo |
- |
1029 |
1029 |
Tineo |
- |
2066 |
2066 |
Ulmo |
- |
1356 |
1356 |
Total nativas |
66435 |
88454 |
154889 |
Total exóticas |
539962 |
159162 |
699124 |
De los cuadros anteriores se desprende que a lo largo de la última década, la producción relativa ha disminuido, en circunstancias que el mercado no había demostrado ninguna contracción. Esto hace suponer que las especies nativas están perdiendo competitividad frente a las especies exóticas, las cuales tienen un mercado más estable.
Esta situación se debe fundamentalmente a que el mercado de maderas nativas no cuenta con estrategias de comercialización adecuadas, sus estándares de calidad no se han establecido claramente, y su oferta se presenta disgregada y discontinua en el tiempo y espacio geográfico.
b) Demanda externa
Respecto a los mercados internacionales, las maderas aserradas nativas tienen como destinos de venta una gran cantidad de países, los que exigen calidades estándar y continuidad de la oferta, básicamente. Los principales destinos son los siguientes países a los que se destina la producción (son):
Cuadro
9: Volumen de madera
aserrada según país (m3) año 1999
|
Total |
EEUU |
Japón |
Argentina |
Italia |
España |
Bolivia |
Egipto |
Otros |
Total |
29405,3 |
6496,9 |
1241,3 |
3895,3 |
5391,1 |
4733,5 |
3776,7 |
1097,9 |
2772,9 |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Lenga |
22608,4 |
6246,5 |
245,2 |
1257,3 |
5352,8 |
4487,5 |
3745,9 |
|
1273,3 |
Raulí |
3493,4 |
60,1 |
63,7 |
2571,5 |
38,3 |
205,5 |
|
|
554,3 |
Ulmo |
1803,4 |
1,6 |
|
40,5 |
|
|
|
1097,9 |
663,5 |
Roble |
1001,9 |
20,4 |
813,2 |
20,7 |
|
2,6 |
|
|
145,1 |
Coihue |
241,3 |
76,9 |
119,2 |
2,2 |
|
37,9 |
|
|
5,1 |
Alerce |
132,5 |
34,8 |
|
|
|
|
|
|
97,6 |
Tepa |
121,3 |
56,6 |
|
|
|
|
30,8 |
|
34 |
Laurel |
3,1 |
|
|
3,1 |
|
|
|
|
|
Del cuadro anterior se desprende que la especie con mayor volumen de envíos es la lenga con 22.608 m3, seguido por el raulí con 3.494 m3. En cuanto a los países, los principales destinos son EEUU, Italia, España y Argentina.
Respecto a las astillas provenientes de bosque nativo, los envíos se realizaron en un 100% a Japón, país que compró 958.000 m3 durante el año 1999 (Infor, 2001).
Las exportaciones se han visto contraídas, principalmente por la baja calidad de los bosques y su mayor alejamiento de los centros urbanos, lo que ha obstaculizado a los exportadores el envío al exterior de rollizos o de maderas aserradas. El corto período de cosecha, madereo y transporte impuesto por el clima contribuye a limitar las posibilidades de exportación de trozos y tablones de maderas nativas.
La experiencia exportadora ha demostrado que los clientes externos diferencian entre la maderas nativas procedentes de bosques maduros (old growth) y de renovales (second growth); por las de bosques juveniles pagan precios inferiores. Los importadores exigen que los embarques se ajusten a las especificaciones comprometidas, en particular en cuanto a uniformidad en el color y sus tonalidades (López, 1998).
Como productos con buenas opciones exportadoras se consideran a los listones sólidos sin encolar y cepillados en las cuatro caras, así como a piezas PET de largos precisos para ser utilizadas en remanufacturas. Los importadores son muy exigentes en cuanto a contenido de humedad, seriedad y oportunidad de las entregas, consistencia en la calidad de los productos y estabilidad de los precios (Op. Cit).
La información anterior permite inferir, que es primordial, identificar calidades de las maderas, y junto con ello, concentrar los esfuerzos en aquellos productos que presentan los mayores retornos económicos.
c) Los productos
- Maderas
En el mercado nacional los principales usos de las maderas nativas son la construcción (madera estructural) de viviendas, la fabricación de ventanas y de muebles, sus piezas y partes componentes, la artesanía y la elaboración de otros productos menores.
Las empresas industriales y las barracas son los principales consumidores de las tablas, tablones, cuartones, chapas y hojas foliadas, producidos por los aserraderos y debobinadoras. Estos centros de acopio y/o procesamiento comercializan una amplia variedad de productos que se clasifican en madera en bruto, madera cepillada, molduras, guardapolvos, junquillos, pilastras, batientes de puertas, marcos de puertas y de ventanas, terciados, pisos, durmientes de ferrocarril, crucetas para postes eléctricos, fortificaciones de instalaciones mineras, jabas para pesquerías y otros (López, 1998).
De la información anterior se desprende que quienes desean ingresar al mercado de maderas nativas o bien quienes deseen mejorar su actual negocio, debieran enfocar la silvicultura de sus bosques y el proceso de producción hacia la obtención de dichos productos.
En cuanto al tratamiento de la madera para su venta, el secado constituye un requisito fundamental, dado que influye en el peso, en la calidad de la elaboración, en el encolado y pintado, en la estabilidad dimensional y en la resistencia a la pudrición que aquella presenta. La madera aserrada verde es colocada al aire para su secado, o es introducida en cámaras de secado con temperatura y humedad controladas. Este método artificial asegura el estabilizado de la madera y su acondicionamiento a cada uso final, pero resulta muy caro en especies que requieren entre 30 y 35 días de cámara para reducir su contenido de humedad a menos del 10% (Op. Cit). Sin embargo es un gasto ineludible si se desea acceder a la venta de productos de calidad óptima. Del total de madera aserrada del país, sólo un ( 35%) puede ser sometido a secado artificial. Esa reducida capacidad de secado y los costos de la energía, limitan la oferta exportable de productos fabricados con maderas nativas, situación que puede ser aún más crítica si en los mercados internacionales se imponen mayores restricciones en materia de preservantes de madera (contra hongos o insectos) contenedores de elementos químicos no degradables y contaminantes del medio ambiente.
Por ejemplo, la madera de coigue es difícil de secar. Si es
secada al aire, cualquier deficiencia en el proceso se traduce en manchas negras
que dañan su valor decorativo. Por ello los trozos secados al aire se exportan
generalmente para pallets. El secado artificial del coigue dura entre 30 y 35
días, al término de los cuales contiene el 8% de humedad, período de tiempo
en que el capital ha permanecido inmovilizado y en que se ha incurrido en un
elevado gasto en energía eléctrica, en circunstancias en que el precio de
venta no es superior al de otras maderas de secado más rápido y barato. La
madera de tepa cuando no está bien seca desprende un fuerte mal olor. El secado
de la lenga en horno tarda entre 25 a 30 días; pero cuando se la coloca al aire
bajo techo por unos 4 meses, requiere solo unos 15 días de secado en horno para
bajar su contenido de humedad al 7%.
- Leña
En Chile, la comercialización de la leña es un proceso no normalizado desde el punto de vista de las dimensiones del producto, unidades de medida y contenido de humedad, además los canales de comercialización son bastante diferentes según se trate de leña para producción de energía industrial o consumo residencial (Reyes, 2000).
El mercado de leña y sus derivados presentan características muy diferentes al resto de los energéticos. En el sector residencial rural, que es un importante consumidor de leña, no opera la comercialización convencional, sino que normalmente, ésta es recolectada por las familias en bosques cercanos a su propiedad. Aún cuando no existe el comercio en éstas áreas, se puede asegurar que el costo para la familia es relativamente alto, especialmente en la zona de secano interior, donde es frecuente la dedicación de dos o tres jornadas semanales para la recolección de leña (op. Cit).
Los datos que existen sobre consumo de leña se basan en
aproximaciones ya que la mayor parte de la producción y del consumo de leña
tiene lugar fuera de los canales comerciales o circula por sistemas de
transporte en donde no se llevan estadísticas. Actualmente los únicos
registros que existen provienen de encuestas esporádicas y aisladas en ciertas
localidades del país.
La extracción y producción de leña la realizan empresas simples en cuya actividad predomina la mano de obra. Generalmente la empresa de extracción tiene un grupo pequeño de personas quienes se encargan de cortar y preparar la leña, un vehículo y su conductor, dos ayudantes para cargar y descargar, y dinero para invertir en la operación (Reyes, 2000).
Desde el punto de vista comercial el precio es el principal estímulo para extraer y producir leña. Reyes, (2000), define 12 factores principales que influyen en la variación del precio, estos son:
1. Distancias
2. medio de transporte utilizado
3. tamaños de los trozos
4. destino (familiar o industrial)
5. ventas al por mayor o al detalle
6. localización geográfica
7. disponibilidad de recursos
8. época del año
9. leyes y regulaciones forestales
10. inflación
11. intermediarios
12. mayor demanda
De estos factores, el costo de transporte es el principal elemento en la estructura del costo y precio de la leña, ya que éste representa entre un 40 a un 60% del costo de producción total.
Dentro del proceso operativo de la comercialización de la
leña, se identifican los Oferentes, Demandantes, Productores e Intermediarios.
Pertenecen a este último grupo todos los transportistas que se dedican a la
compra y venta de leña, ellos influyen enormemente en el precio final que
tendrá el producto en el mercado.
Proceso operativo de la comercialización de leña:
Peq. Propietarios Transportistas Vendedores Clientes finales (barracas, mercados)
En cuanto a los canales de comercialización de la oferta, Reyes, (2000), distingue 4 alternativas que operan en el mercado de la leña:
A través de la compra directa en el campo (45%)
La preferencia de los locales de venta por ir directamente al campo a comprar el
producto, es la más utilizada por los medianos y grandes locales de venta. Esta
alternativa permite ahorrarse el costo de incluir otro agente en la cadena de
comercialización, evitando con ello que el producto eleve su precio final. Este
grupo posee los medios de transporte adecuados para ello. Bajo esta modalidad,
los precios que se obtienen son los más bajos, puesto que generalmente realizan
la compra en camiones propios, ahorrando el flete.
A través de un intermediario que lleva leña desde el campo
al local de venta (36%)
En el caso de los intermediarios, la segunda forma más utilizada, la leña se
compra en el campo y se vende posteriormente en la ciudad. Este canal de
comercialización opera con gran periodicidad, lo que permite transportar
grandes volúmenes, siendo capaces por ello de absorber un gran porcentaje de la
demanda existente por parte de algunos locales de venta medianos y pequeños.
Esta alternativa es especialmente considerada por parte de pequeños productores
que no tienen la posibilidad de hacer llegar directamente sus productos a la
ciudad. Respecto al margen, esta alternativa genera las mayores utilidades, aún
cuando su volumen de venta anual es el más bajo.
A través del productor que transporta él mismo la leña al
local de venta (12%)
En el caso que el productor transporte su producto, éste necesariamente eleva
sus costos al incurrir en gastos de transporte al llevarlos a los centros de
venta. Los locales que se abastecen del productor, es decir, en el que los
propios dueños de la materia prima ofrecen el producto en la ciudad, son los
que pagan los precios de compra más altos, superando incluso a los
intermediarios. Además generan las menores ganancias netas. Esta situación de
comercio se sustenta en lazos de amistad o parentesco más que en la
conveniencia de los precios.
A través del autoabastecimiento, llevando leña de su
propiedad (7%)
En el autoabastecimiento, la desventaja operativa es que el dueño del predio
incurre en los gastos de mantención del mismo, siendo sus costos mayores a los
de productores que manejan el bosque con un destino específico. Bajo esta
modalidad, los precios de venta finales son más altos, debido a que el
productor no posee los conocimientos para trabajar eficientemente en todo el
proceso de venta del negocio (producción de leña, proceso de venta,
financiación).
Por el lado de la demanda, es posible diferenciar entre el abastecimiento utilizado en el sector residencial y en el sector industrial y público respecto a sus formas de abastecimiento.
Cuadro
10: Tipos de
abastecimiento utilizados el sector residencial de P. Montt
Abastecimiento |
Volumen
(m3/año) |
% |
Locales
de venta |
57.256,4 |
23,36 |
Camiones |
50.252,0 |
20,50 |
Proveedor
fijo |
79.902,4 |
32,60 |
Compra
en el campo |
54.440,3 |
22,21 |
Autoabastecimiento |
3.264,0 |
1,33 |
Total |
245.115,1 |
|
En este caso, el proveedor fijo es lo más común, ya que asegura un método confiable y cómodo para aprovisionarse de leña. En segundo lugar los locales de venta y la compra en el campo, son alternativas frecuentadas por los consumidores. El consumo medio por hogares que consumen leña es de 10,52 m3/año, y el consumo per. capita es de 1,61 m3/año. Las especies más utilizadas son un 33,2% de ulmo; 28,6% de luma, 19,5% de tepú, 15,75% de broza y la diferencia de otras especies (2,95%).
En lo se refiere al sector público, industrial y comercial, la demanda se desglosa en el siguiente detalle:
Cuadro
11: Tipos de abastecimiento utilizados en el sector público e industrial
X región
Abastecimiento |
Volumen (m3/año) |
% |
A
través del productor |
4.378,0 |
49,5 |
A
través del intermediario |
3.369,6 |
38,1 |
Autoabastecimiento |
1.060,3 |
11,9 |
Compra
en el campo |
42,9 |
0,5 |
Total |
8.851,0 |
|
En este segmento, lo que más interesa a los demandantes es que les aseguren el continuo abastecimiento junto con una óptima calidad. Generalmente este sector cuenta con intermediarios establecidos que les garantizan el flujo continuo de stock, también lo hacen por productores, y de sus propios bosques en el caso de algunas empresas. Muchas empresas tiene convenios o contratos con productores e intermediarios para transportar los volúmenes requeridos.
En el sector industrial el abastecimiento por especie es el siguiente: 81,37% de broza, 13,78% de tepú, 4,7% de ulmo, y 0,15% de luma. El gran uso de broza en este sector se debe al gran volumen que se usa en calderas, y esta alternativa es la más económica.
Finalmente resumiendo los antecedentes por especie del sector residencial e industrial de P.Montt, el volumen del consumo de especies es el siguiente:
Cuadro
12: Sector residencial e industrial de P. Montt
Especie |
Volumen (m3/año) |
% |
Ulmo |
81.986,2 |
32,26 |
Broza |
77.254,2 |
30,40 |
Luma |
47.845,5 |
18,83 |
Tepú |
39.812,4 |
15,67 |
Otras |
7.067,8 |
2,84 |
Total |
253.966,1 |
|
Del cuadro anterior destaca la fuerte demanda que existe sobre la especie ulmo, con más del 30% del consumo total. Cabe recordar que este detalle es válido exclusivamente para la X región, dado que la composición de especies variará según la región comprometida. Esta región ocupa el segundo lugar en cuanto a volúmenes de consumo de leña.
|
|